Bueno, pues ya estoy en Annecy. Llegué
en un tren sin aire acondicionado y sin luz. Ninguna luz, ni siquiera
de emergencia. Cuando pasábamos por un túnel (y pasamos por varios)
no se veía nada en absoluto.
El tren salía de Lyon, donde he pasado
menos de 24 horas, pero creo que me ha dado tiempo a recorrerlo casi
entero. Una ciudad muy bonita pero que odia a sus turistas ya que
tiene todas sus cosas de interés cimas de distintas colinas. De Lyon
me quedo con la anchura del Ródano y la cama de mi hotel. Ambas
cosas accesibles sin subir cuestas.
Pero bueno, hablemos de Annecy. Estoy
aquí por es festival, que no lo he dicho pero ya todo el mundo lo
sabe porque en los últimos días he estado un poco monotemático. Es
festival es de cine. De cine de animación. Dibujitos vaya.
Ocasionalmente muñecos de plastilina, o marionetas, o cacahuetes...
Mi apartameno (que tiene hasta
minilavavajillas) está en Seynod, que es un pueblo pegado a Annecy.
Tras instalarme, decidí ir a por mi acreditación a Annecy. Quince
minutos de agradable paseo si no fuera por la escasez de sombras y la
temperatura de 30 grados. Al llegar había 4 colas: prensa,
estudiantes, profesionales e invitados. Tras un momento de cavilación
decidí que la que más me pegaba era la de profesionales (no vale
reírse) y por lo que se ve acerté. Tras buscar un rato en dos cajas
tamaño munchkin llenas de tarjetitas la joven que me atendió me dio
mi identificación y una bolsa del festival llena de papeles
redundantes y publicidad (qué me importa a mí el reboot de
astroboy). Entre estos papeles se encuentra una guía del festival de
368 páginas tamaño DINA4 cuyo peso me hizo decidir que lo mejor era
volver al apartamento para descargar y ya cenar por allí. Cené un
plato combinado de filete de ternera, pero que parecía una
hamburguesa. Inesperadamente sabía a filete de ternera. Apasionante,
lo sé.
Es una película documental egipcia que
cuenta la historia reciente de la ciudad de Suez, donde las protestas
contra Mubarak fueron especialmente violentas. Está dividida en
cuatro partes, bastante diferenciadas.
En la primera el director cuenta su
infancia en la ciudad, y es la única en la que se usa la animación.
Animaciones oscuras y cortas, entre las que destaca la matanza de
cuervos realizada por el equipo nacional de tiro.
En la segunda, volviendo ya a la imagen
real, cuenta la historia más reciente y deja hablar a los ciudadanos
sobre los problemas que les ha causado el gobierno. Es, con
diferencia la parte más tediosa y en la que no sabría destacar
nada.
La tercera de las partes está dedicada
a testimonios de gente que ha perdido a alguien en las protestas. De
todos sólo uno de ellos, el de una adolescente que pierde a su
padre, consigue conmoverme un poco. Baja un poco el nivel de
aburrimiento, pero no lo suficiente.
La última es una especie de epílogo
en forma de conversaciones con un librero amigo suyo. Es en la que la
voz en off del director se hace más importante, y plantea algunas
cuestiones bastante interesantes.
En general es una película que se deja
ver, pero que sin duda habría sido mejor con una duración menor (y
eso que sólo dura 71 minutos). Algo especialmente irrelevante y
cansino es la excesiva cantidad de primeros planos de gente posando
con cara triste.
En resumen, algo podría haber sido un
cortometraje documental muy bueno se queda en una película aburrida
con destellos interesantes.
Pre-nota: 5
Post-nota: 5
"De todos sólo uno de ellos, el de una adolescente que pierde a su padre, consigue conmoverme un poco". Corazón de piedra? Parece evidente la respuesta.
ResponderEliminarPaso de leerlo, lo unico que quiero es hacer Spoiler!, que te parece un Spoiler por entrada?
ResponderEliminarMaldito seas, ¿cómo se iba a ver en un túnel si todo estaba sin iluminar? ¡Cómo podría ser de otra manera! Vergonya
ResponderEliminarInteresante primer día, por las cuestas sobre todo xD...
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